De acuerdo al censo realizado el año recién pasado, se determinaron varios aspectos como
la cantidad de personas efectivamente censadas por sexo y grupos de edad, según región, provincia y comuna, además de la cantidad de viviendas.

En dicha ocasión se informó que la población del país es de 17.574.003 personas y que el total de viviendas en el país es de 6.499.355 100 unidades.

En relación con los migrantes, se concluyó que hay un total de 746  mil personas, en este sentido no existe contradicción alguna con las cifras entregadas por la autoridad en el marco de la Nueva Ley de Extranjería y, por el contrario, dan cuenta de que las medidas anunciadas al respecto se hacen cargo de un ingreso descontrolado de extranjeros al país y de la necesidad de poner orden en el tema migratorio.

En temas de vivienda se censaron un total de 6.499.355, lo que representa una tasa de crecimiento de 2,6%. respecto del Censo de 2002.  Esto es levemente inferior al 2,7% registrado en el censo de 2002 versus el de 1992.

En comparación con censos anteriores, se evidencia un aumento en el acceso a la red pública de agua, el cual corresponde a un 93% de las viviendas en el censo de 2017. Dicha cifra era de 91% en 2002 y 86% en 1992, lo que es positivo para nuestro país y su desarrollo.

En esta misma línea, el 7,3% de las viviendas particulares ocupadas con moradores presentes tiene personas en condición de hacinamiento a nivel nacional. Lo que representa una baja importante respecto del Censo 2002 donde este valor llegaba a 17,2%. Se entiende por hacinamiento cuando en una vivienda  hay igual o más de 2,5 personas por pieza destinada a dormir.

Además, la disminución del hacinamiento no solo se ve beneficiada por el aumento de viviendas en el país, sino que también por la disminución del número de personas promedio por hogar y el aumento de los hogares unipersonales, lo cual confirma el fenómeno de  transición demográfica que experimenta el país.

La población urbana representando el 88% de la población, mientras que en el censo de 1992 era un 83%  y de 87% en 2002.

Por otra parte, el promedio de hijos que las mujeres han tenido a lo largo de su vida fértil (15 a 49 años) se ha reducido en el tiempo. En el Censo 2002 la paridez media fue 1,6, mientras que en el Censo 2017 se situó en 1,3 hijos por mujer. Lo que llama la atención es la cantidad de mujeres sin hijos ya que en 2002 era el 22,7% y en 2017 fue un 24,2%.

De la cantidad de personas censada, tan solo el 12% se consideraron pertenecientes a un pueblo indígena u originario y el 9,9% de la población se consideró Mapuche.